Hallwood Media firma contrato discográfico con artista generada por IA en medio de incertidumbre sobre derechos de autor

Puntos clave
- Hallwood Media firmó un contrato discográfico con la letrista Telisha "Nikki" Jones, creadora del artista generada por IA Xania Monet.
- El acuerdo incluye una oferta de varios millones de dólares.
- La música, voces y persona visual de Monet son producidas utilizando el generador de música de IA Suno.
- Los expertos en derechos de autor afirman que solo las letras escritas por humanos pueden ser elegibles para la protección; los componentes generados por IA no lo son.
- No hay registros de derechos de autor para Jones o Monet en la base de datos de la Oficina de Derechos de Autor de EE. UU.
- Los líderes de la industria advierten que la falta de derechos ejecutables podría reducir el valor comercial de la música generada por IA.
- El senador Peter Welch presentó un proyecto de ley para aumentar la transparencia sobre los datos de entrenamiento de IA.
- Hallwood Media y el gerente de Jones no han proporcionado comentarios detallados sobre el contrato o la posición legal.
Hallwood Media ha firmado un contrato discográfico con Telisha "Nikki" Jones, la letrista detrás del acto de R&B generada por IA Xania Monet. El acuerdo incluye una oferta de varios millones de dólares. La música, voces y persona visual de Monet son creadas utilizando el generador de música de IA Suno, lo que plantea dudas sobre la elegibilidad para los derechos de autor.
Contrato discográfico con un artista generada por IA
Hallwood Media ha entrado en un contrato discográfico con Telisha "Nikki" Jones, una letrista de Mississippi que crea música para el personaje de R&B generada por IA conocida como Xania Monet. El acuerdo, que se informa incluye una oferta de varios millones de dólares, marca un momento notable como un sello discográfico tradicional respalda a un acto cuya imagen, voces y música son producidas por inteligencia artificial.
Tecnología de IA detrás de la música
Las canciones de Monet son generadas utilizando Suno, un generador de música de IA que promueve el modelo con letras escritas por humanos y produce pistas completas, incluyendo interpretaciones vocales. La imagen visual y los materiales promocionales para Monet también son creados por IA, dando la apariencia de un artista convencional mientras el contenido subyacente es generado por máquina.
Implicaciones de derechos de autor
Los académicos y practicantes de derechos de autor enfatizan que la ley actual de EE. UU. protege solo las obras que contienen autoría humana. En las creaciones asistidas por IA, solo los elementos expresivos hechos por humanos, como las letras de Jones, pueden ser registrados para los derechos de autor. La composición y grabación generadas por IA, que carecen de aportación creativa humana, no son elegibles para la protección bajo los estatutos existentes.
La Oficina de Derechos de Autor de EE. UU. confirma esta postura, señalando que dar instrucciones a un sistema de IA no confiere autoría al usuario. Hasta ahora, no hay registros de derechos de autor para Telisha Jones o Xania Monet en la base de datos en línea de la Oficina.
Reacciones de la industria
Los representantes de la Alianza de Derechos de Autor advierten que sin una propiedad clara de los derechos de autor, el valor comercial de la música generada por IA puede ser incierto. Argumentan que los compradores podrían obtener el mismo contenido de forma gratuita, cuestionando la razón para pagar por un producto que carece de derechos ejecutables.
Hallwood Media no ha comentado sobre los detalles del contrato, y su gerente, Romel Murphy, ha redirigido las preguntas sobre detalles legales al sello.
Contexto legal y legislativo
La atención del Congreso sobre el tema está creciendo. El senador Peter Welch presentó una legislación que requiere que los desarrolladores de IA revelen los datos de entrenamiento, lo que permite a los titulares de derechos de autor evaluar si sus obras han sido utilizadas en el entrenamiento del modelo.
Estos desarrollos resaltan un cambio cultural más amplio a medida que las herramientas de IA se vuelven más prevalentes en la creación de música, superando los marcos legales existentes y generando llamadas a regulaciones actualizadas.